La difícil tarea de los buenos guiños : Vol. 2

Por María Victoria Martín (Maky)

Los lazos familiares inundaron al cine desde films como ¡Qué bello es vivir! (1946), El libro de la selva (1966), Star Wars (1977)Los Goonies ( 1985), Ratatouille (2007) llegando a su estadío actual representado por Marvel, la gran familia del cine. El caso de Guardianes de la Galaxia Vol.2 no es ajeno, en particular este segundo volumen, donde lo dramático (filial) se presta primordial durante las dos horas del film, exacerbando el clima narrativo adquiriendo un sabor empalagoso y latoso.

Esta segunda entrega dirigida nuevamente por James Gunn ya no indaga acerca la formación de este cuarteto de voluntades heterogéneas, sino que busca un enfoque de pertenencia popular : se centra en la herencia de Star-Lord (Chris Pratt), su vida, sus orígenes, dejando muy poco en relieve las vidas de sus camaradas de aventuras. Tanto Gamora, Drax como Rocket (inclusive Yondu) resultan solo accesorios rentables, ni hablar de Baby Groot

Inclusive los personajes «malignos» (excepto el principal) son en sí paneos súbitos, hasta incoherentes.

La incursión de la cultura pop, el absurdo y los contrastes continúan siendo una marca de agua para Guardianes, garantizando la risa fresca, la mirada de asombro y el entretenimiento. El film comienza con un opening característico de Marvel, donde se presenta el carácter familiar de los personajes, y del film, de modo excesivo. Durante los primeros cuarenta minutos la trama es una estructura confusa donde el espectador podría preguntarse ¿Contra quién definitivamente deben combatir?, la respuesta no se presenta y la historia prosigue con letargo y lagunas narrativas, coincidiendo, de buenas a primeras con «la fuerza del cariño», la gran respuesta del volumen 2. En el OST (sin objeciones) implícitamente se advierte esta respuesta al amor como fibra esencial de lucha y compañerismo, siendo por momentos un interesante uso del lenguaje cinematográfico, en otros un abuso de las ganancias adquiridas.

Los personajes no prosperan en el film, y fuerzan los chistes de manera patosa, por ende pierden el encanto captado en la primera película. Ahora hay claramente personajes de reparto y estrellas definidas, aquel conjunto con tanta química se deshace en divisiones y discusiones egoístas,  postergando aquello con lo que tanto lucharon en la primera entrega de sus aventuras.

El uso del actor Kurt Russell no es casual, buscar reivindicar al cine de clase B desde una pantalla narrativa desinteresada, donde al director poco le importa la trayectoria de Russell con tal de que ponga la cara para empresas Marvel y sea otro acto pop para el film.

Guardianes de la Galaxia anunció su tercera entrega, en esta estrega del 2017 resultó ser mezquina, y un recreo sin lustre, por ello nunca esta de más recurrir a la sabiduría oriental para decir : ten cuidado con lo que deseas…

guardiansofthegalaxy2-babygroot-detonator1                Hay que dejar de robar con Baby Groot por varios años

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